Slide gui·dance Un espacio para desnudar la
verdadera naturaleza del cuerpo.
La danza como recurso de
exploración y celebración.

La comprensión de nuestra verdadera identidad, al comienzo se realiza de manera intelectual y luego, de manera paulatina, se va permeando en nuestra vida cotidiana. Sin embargo, la dimensión de lo corporal es decir: el sentirnos un cuerpo, es la más difícil de colonizar. Por ello, del mismo modo que para para aprender a vivir sin dolor: primero hay que aprender a vivir con él; para poder reconocer nuestra dimensión no corpórea o no local, primero hay que entrar en el cuerpo. La misma danza muestra y resuelve esta paradoja, para poder dar un salto: a mayor contacto con la tierra, mayor será el empuje y el salto será más alto. Es decir que hay que entrar en la tierra para despegarse de ella.

 

 

Es por eso que desarrollé este trabajo como recurso de exploración de la identificacion con el cuerpo. Para poder acceder a un mayor registro de lo corporal y luego comprender su verdadera naturaleza. De este modo la aparente localización del Yo se irá amplificando hasta poder experimentarse sin bordes ni límites y vivenciar claramente que es el cuerpo quien está en Mi y no yo en el cuerpo. Cuando éste comienza a despegarse de capas y capas de condicionamiento, la comunión con el Todo va tomando su lugar y con ello la revelación de la felicidad que estaba eclipsada. Luego … solo queda celebrar!

El escenario más enriquecedor para estas prácticas, es la naturaleza. Quien nos muestra de manera metafórica como la Vida se abre paso, nuevamente de manera paradojica: libre y espontáneamente aunque siguiendo un pulso que denota un orden acompasado de calma y manifestación.

 

 

Si bien este trabajo apunta a realizarse en este ámbito, en la medida que la situación climática no sea la adecuada, puede ser también realizado en un espacio cerrado.